Suele ir de la mano
En aquellos días el señor dijo al profeta: "búscate una mujer y rasura todos los pelitos fuera de tu alma...".
El profeta había caminado 100 días y 500 noches hasta que le sangraron los pies, se le convirtieron en muñones y quedó pidiendo limosna a las puertas de Damasco.
Entonces pasó el Mariscal González. El profeta lo interpeló: "Mariscal, usted prefiere atacar con infantería o con caballería?". González le contestó: "¡caballería! caballos como los que ví en San Isidro, ¡no hay, hermano!"
1 comentario:
Che, flaco, se te piró la línea argumental! lo notaste????
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